Las lesiones y sobrecargas se convierten en un dolor de cabeza tanto para los jugadores como para el cuerpo técnico en variadas ocasiones. Es por esto que el Director Técnico de la Universidad de Chile, Guillermo Hoyos, ha comenzado a implementar un nuevo procedimiento para que sus jugadores se recuperen más rápido y de una manera más efectiva.
Se trata de la Crioterapia, la que se fundamenta en la utilización del frío o las bajas temperaturas como método curativo. Esta se aplica en los deportistas a una temperatura de 190 grados bajo cero durante 3 minutos, favoreciendo a la recuperación muscular. Este sistema busca enfrentar las microrroturas fibrilares, tendinitis, sobrecargas o golpes y mejorar la circulación.
Los primeros jugadores que se han sometido a este sistema son Francisco Arancibia, Lorenzo Reyes y Rafael Caroca. Con este nuevo recurso, se pretende prevenir lesiones a futuro o apresurar eficazmente cualquier herida que presenten los jugadores del club.
