El volante no tuvo problemas para sellar el vital triunfo en Quillota.

Gonzalo Espinoza se cargó con la responsabilidad, quizás con la más importante del año, pero con toda la seguridad que caracteriza su juego, cumplió la tarea y permitió que la «U» sumara de a tres puntos en la quinta región para así pelear de lleno el título del campeonato nacional en estas últimas fechas.

Cuando el partido ya expiraba, y con un San Luis que había igualado las acciones hace pocos momentos, llegó el penal cobrado por Eduardo Gamboa, tras una intervención con la mano por parte Juan Abarca luego de un remate del atacante Nicolás Guerra. El momento se hizo eterno, pues los reclamos y empujones llovieron, y fueron casi tres minutos de espera que acabaron con un solvente remate de Espinoza, que desató los gritos y abrazos en las tribunas del Estadio Lucio Fariña a los 94′.

«Son momentos difíciles que alguien tiene que tomarlo. Mis compañeros me dieron la confianza y tenía que responder de esa manera…» declaró en el post partido sobre la responsabilidad que tuvo a la hora de patear el penal. El ’27’ no se inmutó por el tiempo de espera ni tampoco se achicó ante los hostigamientos de Ignacio González, quien en vano se acercaba a distraer al volante azul. Espinoza miró, apuntó y mandó el esférico a las redes, para posteriormente ir a celebrar el momento junto a la fiel fanaticada universitaria.

Gonzalo festejó su cuarto gol con la camiseta de Universidad de Chile, el segundo desde su retorno, en el cual ha disputado 12 compromisos (10 por el campeonato local). Así como sumó un tanto más a su registro, el equipo de Frank Darío Kudelka también hizo lo propio, escalando en la tabla de posiciones y pisándole los talones al líder de la competición. La seguridad de Espinoza en los doce pasos, y la pasión con que gritó esa anotación, mantienen vivo el sueño del «Romántico Viajero» en esta recta final.