Los azules recibieron 16 goles en los últimos cuatro compromisos.
Lo que muchos temían terminó transformándose en una cruda realidad. La caída ante Colo Colo el pasado 15 de abril por 3 tantos a 1 en el Estadio Nacional, significó el desplome moral y táctico de una Universidad de Chile que esta jornada sufrió la peor derrota de su historia.
Con el 7-0 propinado por Cruzeiro en Belo Horizonte, en compromiso válido por la cuarta jornada de la fase de grupos de la Copa Libertadores, se completó la tercera derrota de los azules en los últimos cuatro partidos, incluyendo el estrepitoso traspié ante Calera, en los que ha recibido la impresionante suma de 16 goles contra su pórtico y pudiendo «celebrar» solo en dos oportunidades.
Lo anterior son números totalmente rojos si los contrastamos con la realidad del equipo antes de aquel fatídico 15 de abril, en la que los pupilos de Ángel Guillermo Hoyos llegaron a obtener 8 triunfos consecutivos, una igualdad y una derrota, con 16 tantos a su favor y 7 en contra. Incluso lograron completar cinco encuentros sin recibir goles.
La solidez defensiva que llegó a ser aplaudida en varias ocasiones y la efectividad de la ofensiva, vivieron los 11 días más crudos en lo que va de temporada, teniendo al ex técnico de la Selección Boliviana en el centro de las críticas.