El entrenador azul cambiaría su esquema de juego de cara al Superclásico del fútbol chileno.
El torneo pasado la Universidad de Chile logró coronarse campeón con un estilo de juego que terminó siendo sello de Ángel Guillermo Hoyos, el sistema 4-3-3. Este esquema fue clave para cimentar el camino al éxito del Romántico Viajero.
Sin embargo, el entrenador ha dado luces de un importante cambio táctico. En lo que va del Transición, Hoyos ha ido modificando la posición de sus jugadores. El trasandino tiende a sacar a uno de los delanteros e incluir a otro mediocampista, pasando a un 4-4-2.
EL INICIO DEL CAMBIO
La U hizo su debut en el presente torneo ante Curicó Unido en condición de visita. El resultado favoreció a los azules por 1-0 con tanto de penal de David Pizarro. En aquel partido, el cuadro laico sufrió la expulsión de Matías Rodríguez, por lo que el adiestrador azul prefirió sacar a un delantero para reorganizar la defensa. El DT hizo ingresar a Felipe Seymour por Yerko Leiva (quien actuaba de extremo). Así, con un jugador menos, Ángel Guillermo Hoyos pasó a un 4-3-2.
En el triunfo por 2-1 frente a Temuco en el Estadio Nacional, el DT hizo ingresar a Rodrigo Echeverría por Francisco Arancibia pasando a 4-4-2. La sustitución se hizo tras el segundo gol de Gustavo Lorenzetti, el cuál terminó dando la victoria a los azules.
En la tercera fecha la U cayó ante San Luis en Quillota. Hoyos no le veía la vuelta al partido por lo que realizó un cambio táctico: hizo ingresar a David Pizarro en desmedro de Francisco Arancibia pasando a 4-4-2. Sin embargo, esto no hizo que el cuadro universitario levantara cabeza y el DT sustituyó a Gustavo Lorenzetti por Sebastián Ubilla volviendo al 4-3-3, que a la postre tampoco le daría resultados.
El pasado fin de semana en el apretado triunfo ante Huachipato por 3-2, Hoyos mantuvo la tendencia. Cuando el partido se mantenía igualado, el trasandino probó nuevamente el 4-4-2. Reemplazó a Iván Rozas por David Pizarro, quien terminó anotando el gol del triunfo.
En lo que va de torneo se ha demostrado que el técnico universitario no teme realizar cambios tácticos si el partido así lo amerita. Por ahora, el cambio de esquema le ha traído más alegrías que frustraciones al cuadro azul. De esta forma, es probable que en el Superclásico del domingo, el técnico aparezca con un volante más en cancha sumando cuatro mediocampistas.