Llegó a la “U” el 2007 a cambio de US$1.000.000. Debutó de la mano de Arturo Salah y terminó coronándose campeón el año siguiente con el "Romántico Viajero". Hablamos de Walter Montillo, quien vive un gran momento en el Shandong Luneng de China y se dio un tiempo para hablar de forma exclusiva con DaleBulla.cl

Si hablamos de ídolos y referentes del último tiempo en la Universidad de Chile, en la retina de los hinchas azules aparece inmediatamente el nombre de Walter Montillo. Es que en los años que estuvo la “Ardilla” en el "Romántico Viajero" logró ganarse el corazón de toda la hinchada de la “U”.

El “Buque Insignia” como lo catalogó el ex técnico azul, Sergio Markarián, estuvo en la Universidad de Chile entre los años 2007 y 2010 para luego emigrar al Cruzeiro brasileño, aunque su máximo deseo es volver a vestir la azul de la “U”, nos confesó.

El año 2007 llegaste como una de las contrataciones más caras del fútbol chileno a cambio de un millón de dólares, sin embargo, tardó en llegar tu consolidación con la camiseta de la “U”, ¿por qué crees que te costó mostrar tu verdadero potencial? Y, por otro lado, ¿cómo viviste esos momentos tan difíciles?

-En primer lugar, el precio lo coloca el club y en ese entonces San Lorenzo puso ese valor. Había hecho una pretemporada muy buena y en un amistoso con La Serena en una jugada desafortunada me lesioné la rodilla (por suerte fue solo un esguince) y al quedarme dos meses sin jugar hizo que perdiera la forma que tomé durante la pretemporada. Después me costó un poco la vuelta, pero son cosas del fútbol, no me reprocho nada porque siempre trabajé para dar lo mejor.

En el fútbol no siempre son buenos los momentos y todo logro requiere esfuerzo, no conozco otra manera.

Tras conseguir el título del Apertura en el 2009, Sergio Markarián te calificó como el “Buque Insignia” del equipo, ¿qué sentiste al pasar de ser criticado en un principio a lograr tal catalogación?

-Con Sergio tuve una relación bárbara y con su cuerpo técnico también, ellos confiaron mucho en mí y yo les pude devolver toda esa confianza haciendo un gran torneo y consiguiendo un campeonato tan anhelado por todos. Sentí felicidad como todas las veces que fui campeón. Con ello, cerramos un ciclo muy largo de trabajo con la sensación más linda que es levantar una copa.

Luego de los difíciles momentos que pasaste junto a tu familia por la enfermedad del pequeño Santino, la barra de Universidad de Chile, “Los de Abajo” te apoyaron de forma incondicional, ¿cómo viviste esos momentos? Y, ¿qué significó la barra en el sentimiento que forjaste con el club?

-Fue un momento muy difícil en la vida de mi familia y junto a mi señora nos tocó vivirlo sin tener la experiencia requerida ni conocer nada sobre tema. En ese momento necesitábamos fuerzas de todos para seguir adelante, y la gente de la “U” estuvo siempre en esos momentos difíciles. Por eso soy tan agradecido y no tengo más que decirles gracias.

El año 2011 debido a tu buen rendimiento en el fútbol brasileño fuiste convocado para jugar por la selección de Argentina, ¿cómo fue compartir camarín con jugadores de clase mundial? Y, ¿en qué contribuyó esto a tu carrera como futbolista?

-En Brasil tuve 5 años maravillosos, lo de Cruzeiro fue realmente increíble y lindo a la vez. Dejar mi nombre en un club tan grande y con tanta historia, para mí es muy lindo.

Lo de la selección fue el punto máximo de mi carrera y lo disfruté mucho, haber sido compañero de tantos cracks y defender los colores de mi país fue inolvidable para mí. Estoy muy agradecido a Sabella por darme esa oportunidad.

Luego de tu buen paso por Brasil, ¿por qué preferiste el fútbol chino en lugar de esperar una oferta de Europa?

-El fútbol es muy dinámico y en el 2013 Cruzeiro me había vendido por un valor cercano a los diez millones de dólares al Santos y al cabo de un año llegó la oferta del Shandong Luneng por el mismo valor. Hablando con la directiva de Santos era un negocio muy bueno para todos, ya que ellos recuperaban la inversión y pensando en los 29 años de edad que tenía en ese entonces, era muy difícil que llegara otra parecida.

De Europa nunca me llegó una propuesta y uno no se puede quedar esperando a ver qué pasa. Personalmente me convenció la idea del técnico porque ya había jugado con él en Cruzeiro. No me arrepiento de haber venido acá porque realmente me ha ido muy bien.

Ya volviendo netamente al tema de la “U”, ¿por qué tu prioridad es regresar al club en lugar de equipos como San Lorenzo (club donde naciste) o Cruzeiro donde también te guardan mucho cariño?

-Yo soy un agradecido de todos los clubes por donde pasé, pero me considero una persona de palabra y en el único lugar en el cual dije que iba a volver fue en la “U”.

No voy a negar que de Cruzeiro ya me llamaron para volver también, pero bueno, la idea es volver a la “U”.

Estas últimas semanas has hecho noticia a través de twitter al responder a los hinchas sobre tu posible arribo a la “U”, en dichos mensajes dices esperar una respuesta, ¿han existido conversaciones entre tú y Azul Azul?

-Siguiendo un poco con la respuesta anterior, todo el mundo sabes que yo quedo libre ahora en diciembre y que puedo firmar un precontrato ahora con cualquier equipo, es por eso que muchos equipos ya se han contactado conmigo y a todos les digo lo mismo: “estoy esperando contactarme con la 'U' y te doy una respuesta”. Pero los tiempos se van acortando y no puedo quedarme esperando.

Con la gente de la U nos comunicamos en junio para poder adelantar el regreso, pero yo entendí que tenían otras prioridades y las acepto. Lo único que quería y aún quiero es volver para ayudar. Pero como dije antes el futbol es muy dinámico y cambiante a la vez. No puedo esperar mucho tiempo porque tengo que responder a las otras cosas.

¿Por qué crees que pasa la negativa de la concesionaria con el regreso de un jugador que le ha dado tanto al club?

-Eso no sabría respondértelo. Hay veces que simplemente están buscando jugadores con otras características y lo acepto. Yo no soy dueño del club ni nada por estilo, soy un simple trabajador que quiere volver y si no se da es una lástima. Pero por suerte y por haber trabajado arduamente durante tantos años tengo otras opciones también.

Todos saben que eres un seguidor de la “U” y de sus partidos, ¿cómo catalogarías el trabajo de Sebastián Beccacece en la Universidad de Chile?, ¿crees que tu fútbol podría funcionar en el esquema que el actual técnico ocupa?

-Hablar desde afuera es muy fácil y no me gusta, puedo hablar como un hincha más y decirte que por lo que he leído al entrenador no se le puede negar que trabaja y mucho. Pero tal vez los resultados y los números en el torneo pasado no fueron de los mejores. Por suerte hoy la “U” está mejor posicionada y aspira a cosas importantes. Además, tiene un plantel muy competitivo y con grandes jugadores.

Por otra parte, si puedo funcionar en un esquema o no, es muy difícil saberlo.

¿Cuándo sabremos qué pasará definitivamente con tu futuro?

-Cuando Carlos Heller o Andrés Lagos se comuniquen conmigo o con mi representante para saber lo que piensan y lo que quieren para el año que viene. Y si no se puede dar la vuelta, no es la muerte de nadie, la “U” tiene un plantel muy rico y seguiremos alentando desde el otro lado.

¿Qué pasará contigo si finalmente no llegas a un acuerdo con Universidad de Chile?

Si no se da lo de la “U” pensaré y revisaré una a una las propuestas que ya tengo en la mano y elegiré lo mejor para mi familia.

¿Qué sensación te provoca el ser comparado con otro ídolo como Leonardo Rodríguez y ser considerado el mejor 10 de la última década?

-Las comparaciones no son buenas y nunca me gustaron, somos dos jugadores de diferentes épocas que nos caracterizamos por dejar una marca en el club.

Por otra parte, me deja muy feliz poder formar parte de la historia de un club tan lindo como la “U”.

¡Tienes alguna anécdota que recuerdes a menudo de tu paso por la “U”?.

-Es difícil recordar una a menudo, pero siempre que nos ponemos hablar de cosas viejas con el “Perro” (Victorino), el “Flaco” Olivera y el “Flaco” Fernández, nos acordamos del partido con Alianza Lima. Después del gol de Seymour y todo lo que implicó ese polémico gol, nos juntamos en la mitad de la cancha y no faltaba nada para terminar el partido cuando yo les digo: “no hagamos foul porque ya termina y se nos vienen todos al área. Sin foul, la puta madre”.

Cuando sacan del medio la agarra el 10 de Alianza, que creo era Montaño, y le metí un patadón terrible jajaj, no sé si fue la euforia o qué, pero lo levanté en el aire. Menos mal que el tiro libre lo patearon muy mal y terminamos pasando a la siguiente ronda.

Por último, ¿qué mensaje le mandarías a los hinchas azules?

-A todos los hinchas de la “U” les mando un abrazo y les agradezco por el apoyo que me vienen dando desde que me fui. Muchas gracias y mucho aguante que este año puede ser muy importante para el club.